Esta es una de las marcas del cristiano. En Mateo 26:11 Jesús dijo a sus discípulos tras quejarse éstos del «desperdicio» hecho por una mujer de un perfume:
«Porque siempre tendréis pobres con vosotros, pero a mí no siempre me tendréis»;
lo que nos enseña que al paso de los siglos siempre habrá pobres y quizá hay más en el S.XXI que en los anteriores.
Pero la ayuda aún más necesaria que ofrecer a los pobres más que la económica, profesional o social es la presentación clara y directa del evangelio de Jesucristo, pues siempre su necesidad espiritual es mayor que la física y además vale para toda la eternidad.