El universalismo es la creencia que afirma que todo el mundo irá al cielo. La misma existencia del cielo y del infierno como realidades y destinos eternos rebate esta afirmación.
La mera existencia del infierno muestra que no todo el mundo irá al cielo. El Señor Jesús durante su vida terrenal habló numerosas veces sobre el infierno siempre acompañado con una invitación abierta a huir de la ira venidera
«Al ver él que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: ¡Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera?» (Mateo 3:7)
En esta línea en el evangelio de Juan 3:18 leemos:
«El que en él cree, no es condenado, pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios»
y añade:
«El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él» Juan 3:36.