La doctrina acerca de la Trinidad (las tres personas de la divinidad) no es algo que cualquier individuo con su capacidad limitada pueda comprender plenamente, pues el concepto está mucho más allá del alcance de nuestras mentes mortales. Sin embargo, Dios ha dado a la humanidad una gran cantidad de información acerca de la Trinidad en las Escrituras que podemos y debemos comprender, aunque nunca va a ser totalmente. Aunque el término «Trinidad» no se encuentra en la Biblia, los componentes de la Trinidad se encuentran en las Escrituras desde Génesis hasta Apocalipsis.
En Génesis 1:26, Dios dijo:
«Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza».
Isaías 48:16:
«Acercaos a mí, oíd esto; desde el principio no hablé en secreto; desde que eso se hizo, allí estaba yo; y ahora me envió Jehová el Señor, y su Espíritu».
El evangelio de Mateo termina con estas palabras:
«Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo» (Mt. 28:19).